Capítulo 7
Lleva el Amor
“Toca las campanas que aún puedan sonar olvida tu ofrenda perfecta, hay una grieta, una grieta en todo así es como entra la luz.”Leonard Cohen
Detectar, revelar y desprenderse de las “historias de terror” es el primer paso. Un paso crucial, pero en el que no queremos estancarnos.
El segundo paso -detectar, crear y difundir las “historias de amor”- se dará al mismo tiempo. Poco a poco se convertirá en el esfuerzo principal, como describe el modelo de los dos bucles.
Las historias de amor – “La naturaleza es nuestra familia”, “El bienestar es el éxito”- aparecen en todo tipo de lugares. En muchas culturas existen desde hace miles de años.
La tarea ahora es ayudar a que estas “historias de amor” se extiendan por todo el mundo. Para que estas historias más precisas y más saludables (“mejores” en ambos sentidos) se conviertan en sentido común.
Para que podamos apoyar el resurgimiento de la narrativa del inter-ser, y diseñar la Economía al Servicio de la Vida que nos ayudará a avanzar hacia mundos más viables.
Este esfuerzo comienza por reconocer que la energía que necesitamos para estas historias es abundante.
Al igual que con las historias de terror, aquí planteamos preguntas que nos ayuden a detectar y compartir las cosas que ya son portadoras de las historias de amor, y a pensar qué cosas nuevas podríamos crear para llevarlas más lejos.
Utilizamos aquí la palabra “trabajo” en el sentido más amplio, para abarcar todo lo que ponemos en el mundo; también podrías llamarlo “juego”.
“La diferencia entre trabajo y juego es sólo una cuestión de actitud. El trabajo, plenamente realizado, es juego.”
Hay grandes historias ahí fuera que ya llevan esta historia de amor.
Como “La Bestia Marina” de Netflix, nominada al Oscar a la Mejor Animación en 2023, que cuenta la historia –¡alerta de spoiler! – de una comunidad que se da cuenta de que las criaturas que creía enemigas son, en realidad, su gran familia.
O esta película de la princesa Moana (Latinoamérica) o Vaiana (España), que muestra un mundo en el que vivimos en relación con el mundo mágico y natural, en cuidadoso equilibrio y cómoda abundancia.
“La abundancia no es la manifestación de la riqueza física. Es la ausencia de escasez del corazón.”
Estas dos películas transmiten la historia de que la naturaleza es nuestra familia, nuestra comunidad, nuestros parientes.
A continuación planteamos algunas preguntas más, para ayudarnos a explorar más a fondo esta historia de amor, acompañadas de algunos ejemplos que hemos observado. ¿Puedes observar alguno más?
¿Cómo pueden nuestras historias animarnos a amar y cuidar el mundo natural?
Estamos inmersos en una historia que crea la idea de escasez, una historia científica de separación, competencia y conflicto.
La historia se desarrolla.
Permanecemos como presos, encarcelados y separados.
Esto es insostenible.
Dale la vuelta a esta historia.
¿Cuántos de nuestros dirigentes crecieron en una relación con la naturaleza?
¿Cuántos políticos comprenden que el mundo natural es un regalo, no una mercancía?
¿Cómo puedo sentirme perteneciente si no tengo una relación con los que me mantienen?
Las plantas nos proporcionan a todos oxígeno, medicinas y alimentos.
¿Cómo es posible que no tengamos un lenguaje para comunicarnos con el mundo natural? ¿Cómo es que no se nos enseña a hablar con los demás seres vivos que nos rodean?
Tenemos que invertir en las plantas.
Invertir en el suelo.
No en el petróleo.
Invertir en las próximas generaciones.
No en la tecnología renovable.
Luchar hasta que nuestras ciudades se llenen de vegetación.
Es hora.
De.
Restablecer una relación.
Una en la que seamos humildes y agradecidos.
¿Es la gratitud el antídoto del consumismo?
¿Nuestra gratitud calma nuestra necesidad de consumir externamente?
La naturaleza es un regalo, no nos pertenece.
¿Qué puedo devolver?
La revolución tecnológica no va a salvarnos, lo hará recuperar una relación con las plantas.
Ellas nos recordarán nuestra conexión.
Nuestra magia.
Nuestro lugar.
Nuestra pertenencia.
¿Cómo podrían nuestras historias ayudarnos a comprender el verdadero coste ecológico de nuestra economía?
“Cuando debamos pagar el verdadero precio del agotamiento de los regalos de la naturaleza, los materiales serán más valiosos para nosotros, y la lógica económica reforzará, y no contradecirá, el deseo de nuestro corazón de tratar el mundo con reverencia y, cuando recibamos los regalos de la naturaleza, de utilizarlos bien.”
¿Cómo podrían nuestras historias crear alianzas y conexiones entre nuestros semejantes y el mundo más que humano?
“Todo el cosmos es relacional: las relaciones son primordiales para las cosas que están relacionadas.”
Crédito: Patternity
“El poder de la tecnología es inmenso. La elección es nuestra: si lo utilizamos para amplificar nuestra humanidad y conexión entre nosotros y con el planeta o si lo utilizamos para obtener beneficios a corto plazo a costa de la humanidad y de todos los seres conscientes. ”
Se supone que el bienestar es el resultado de la obsesión por la productividad de nuestro actual diseño económico.
Por eso nuestras historias se centran a veces en el bienestar, pero es menos habitual que revelen que la economía se interpone realmente en nuestro camino para alcanzarlo.
Christopher Robin de Disney es, suavemente, diferente: nos anima a cuestionar a qué dan prioridad los diseños económicos actuales, e imagina rediseñarlos para dar prioridad a lo que realmente importa: el amor, la familia, las relaciones y el bienestar.
Y aunque este anuncio del supermercado Aldi no critica activamente el diseño económico, sugiere una forma de hackearlo para apoyar y mejorar nuestras comunidades, y sentirnos mejor en el proceso.
En estas historias la gente no se deshace totalmente de la productividad, sino que se asegura de que nos centremos en lo que realmente importa.
Que nos centremos en la salud de nuestra familia, en el sentido más pequeño y amplio.
Que damos prioridad a la vida próspera, abundante y floreciente.
Que servimos a la vida que necesitamos vivir.
Y si esto te parece un sacrificio, considera que ahora mismo incluso los que vivimos en naciones supuestamente ricas estamos sacrificando nuestro bienestar -lo que realmente creemos que más importa- en el altar del crecimiento y el consumo sin fin.
Sigue leyendo para ver más preguntas exploratorias y ejemplos, y comprueba si te das cuenta de otras “historias de amor” en las que “el bienestar es el éxito”.
¿Cómo pueden ayudarnos nuestras historias a reconocer la riqueza del bienestar?
“La cultura de la vieja historia está tan omnipresente, especialmente la publicidad y el consumismo, que no hay espacio para que la gente respire y piense en una nueva historia. El reto de crear espacio no es para tomárselo a la ligera.”
¿Cómo pueden ayudarnos nuestras historias a imaginar un futuro en el que sirvamos a la vida?
¿Cómo pueden nuestras historias ayudarnos a ver mejor dónde hemos estado y a imaginar hacia dónde podríamos ir?
Según nuestros conocimientos actuales, la Tierra existe desde hace más de 4.000 millones de años.
Los humanos, unos 150.000.
La industria pesada desde hace 200.
Si reducimos la edad de la Tierra a un año, los humanos aparecen sobre las 23:30 del 31 de diciembre. La industria pesada comienza unos segundos antes de medianoche.
Esto significa que, aunque nuestro modo de vida actual parezca tener un sentido de longevidad, quizá incluso de permanencia… no refleja la realidad.
Nos conviene echar otro vistazo. Considerar si existe o no un enfoque mejor.
“El ROI (retorno de la inversión) de una bellota es pobre en su primera o segunda década. No optimices para obtener el rendimiento más rápido. Esa mentalidad rara vez construye algo notable.”
La profecía del Águila y el Cóndor
Una profecía de una Primera Nación habla de que la sociedad humana se dividirá por dos caminos, siguiendo al Águila (del Norte) y al Cóndor (del Sur).
El Águila es una figura para el camino de la mente: para el racionalismo, lo industrial, lo masculino. El camino del Cóndor es el del corazón, la intuición, la conexión con la Tierra, lo femenino.
La profecía del Águila y el Cóndor dice que la colonización de América Latina a partir de la década de 1490 inició un periodo de unos 500 años durante el cual el pueblo Águila se haría tan poderoso que casi aniquiló al pueblo Cóndor.
Después vendría el siguiente periodo de 500 años, el actual, en el que surgiría el potencial para que el Águila y el Cóndor se unieran, volaran en el mismo cielo, creando un nuevo nivel de conciencia para la humanidad.
Estas preguntas y ejemplos de “historias de amor” son sólo un comienzo.
Hay más en la Biblioteca y muchas más en el mundo.
¿Qué otros ejemplos puedes observar?
¿Qué otras preguntas podemos hacer?
Todos y cada uno de nosotros somos necesarios ahora, para difundir estas historias de amor y ayudar a tejer esa narrativa del inter-ser, para que juntos podamos diseñar una Economía Al Servicio de la Vida.
Ésta es la tarea que tenemos entre manos ahora.
“El papel del artista es hacer irresistible la revolución”